Diabetes y Ramadán: ayunar bajo control

En España hay cerca de 1,6 millones de musulmanes por lo que, teniendo en cuenta que la prevalencia de la diabetes se sitúa en el 13,8%, según el estudio Esta dirección de correo electrónico está siendo protegida contra los robots de spam. Necesita tener JavaScript habilitado para poder verlo., más de 220.800 musulmanes diabéticos están llamados a cumplir el ayuno que dicta su religión a partir del próximo viernes.

Por estos motivos MSD ha puesto en circulación el material informativo «Las realidades del ayuno durante el Ramadán», destinado a personas con diabetes tipo 2, que proporciona una serie de consejos que se basan en las Recomendaciones para el manejo de la diabetes durante el Ramadán de la Asociación Americana de la Diabetes (ADA), así como en herramientas de apoyo para un manejo eficaz de la diabetes mientras se ayuna.

«El ayuno representa un riesgo significativo para la salud de las personas con diabetes, pero a pesar de esto, muchas de ellas ayunan sin consultar con un médico y, en consecuencia, pueden desarrollar complicaciones agudas», ha indicado Wasim Hanif, médico especialista y profesor honorario en Diabetes y Endocrinología en el Hospital Universitario de Birmingham en el Reino Unido. «Es importante recordar que los profesionales sanitarios deben hablar sobre el ayuno y la dieta con las personas con diabetes tipo 2 en el momento del diagnóstico y de forma regular».

Rosario Serrano, Médico de Familia y miembro del Grupo de Estudio de la Diabetes en Atención Primaria de Salud (GEDAPS), añade que «es aconsejable que los profesionales sanitarios realicen evaluaciones médicas a cualquier persona con diabetes que se plantee ayunar durante el Ramadán».

Las personas con diabetes que optan por ayunar durante el Ramadán se abstienen de comer, beber y utilizar medicamentos por vía oral desde antes del amanecer hasta después de la puesta del sol. Por este motivo, se recomienda comer alimentos como el trigo, la sémola y las judías durante el Suhoor –la comida que se realiza justo antes de que salga el sol, cuando empieza el ayuno- ya que estos alimentos liberan azúcares lentamente. Asimismo, en Iftaar –la comida nocturna con el que termina el ayuno- se aconseja mantener la actividad física habitual y comer alimentos que liberen azúcar rápidamente, como las frutas, que aumentarán rápidamente su glucemia, seguidos de hidratos de carbono de acción lenta. Por último, es aconsejable evitar alimentos con un índice alto de grasas saturadas (manteca, samosas y pakoras) o azúcares e intentar dividir las calorías en varias comidas a lo largo de las horas en las que no se ayune.

Según Rosario Serrano, «las personas con diabetes tipo 2 deben considerar los riesgos que tiene ayunar». En el caso de las personas con diabetes tipo 2, se sabe que la menor ingesta de alimentos, junto con ciertos medicamentos para la diabetes son un factor de riesgo para la baja concentración de azúcar en la sangre (hipoglucemia), que si se deja sin tratar puede dar lugar a problemas médicos graves, incluyendo pérdida de conciencia, convulsiones o ataques, que necesitan un tratamiento de urgencia. De ahí que sea esencial comprobar la glucemia con frecuencia durante el día. También es recomendable que el paciente pida una cita de seguimiento después del Ramadán para evaluar posibles ajustes necesarios en su medicación.

El material informativo «Las realidades del ayuno durante el Ramadán» está disponible a través de la web de MSD España: www.msd.es/pacientes , en el área de Pacientes.

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