Según datos presentados durante el congreso de la ISTH en Toronto (Canadá)
Los pacientes anticoagulados son aquellos que reciben tratamiento para evitar la aparición de un ictus, debido a que padecen enfermedades como la fibrilación auricular, la arritmia más común que multiplica por cinco el riesgo de padecer un infarto cerebral. Poner en marcha protocolos clínicos para atender al paciente anticoagulado, detectar las áreas de mejora y ofrecer formación a todos los profesionales sanitarios implicados en este proceso, son algunas de las acciones que se llevarán a cabo y con las que se pretende mejorar la calidad de vida de estos pacientes. En este contexto, alrededor de 50 médicos de varias especialidades, como cardiología, hematología y medicina interna, se han formado durante la Jornada de Actualización en el manejo de la Anticoagulación, que tuvo lugar en el Hospital La Vega de Murcia.