El trabajo demuestra que un feto de 16 semanas ya es capaz de oír de forma eficaz y responder a la música, siempre que ésta se emita desde la vagina de la madre. El sonido que le llega desde el exterior y desde su madre casi no lo oye. Lo percibe como un susurro y de forma distorsionada. Con música emitida desde la vagina, el 87 % de los fetos mueven la boca o la lengua y casi el 50 % sacan la lengua al máximo.
06 Octubre 2015